Esencial como el aire
estás ahí siempre,
notable espectador,
Compartes mis lugares.
Te tengo. Eres perpetuo.
Si tiendo la mano
te encuentro mío,
solícito, amigo, compañero.
A tu lado me levanto cada día
y no me pides nada.
Siempre en silencio,
humilde, no pretendes.
Apenas eres
lo que tengo al lado.
Con eso te conformas.
En el lecho
-antes del sueño-
te tomo entre mis manos,
delicado y noble,
sutil y profundo.
No podría estar si ti
y no lo sabes,
querido,
muy querido
libro mío.
Autora: Ana Buquet
5 comentarios:
Jajaja, ya te entendí lo que me querías decir, ya me he visto. Muchas gracias.
El libro...el nos hace entrar en un mundo lleno de imaginación...
Muchos besos.
Felicidades por tu blog, seguiré visitándote, un abrazo.
Los libros son como un sueño
¡Que curioso es el sueño! No tienes control sobre tu cuerpo y este, relajado y tranquilo deja asomarse, por un momento a nuestro otro yo, al joven impaciente, al joven ilusionado, sediento de nuevos retos, de nuevas aventuras, ese que duerme... ¡cuando estamos despierto!
¡Duerme! Querida amiga
Cuando duermes, yo vigilo tu sueño."
Hermoso de veras... Un besazo amiga
Muy bueno. Universo en dos: Un libro, se escribe para que las letras se toquen y los sueños se vivan, y otro libro se lee para que puedas tocar, puedas vivir y puedas soñar. Uno es la cara del otro,y ambos el mismo universo.
Sakkarah, gracias por dejarme hacer ese cambio ;)
Un beso
Carlos, es un placer tener la visita de un poeta, gracias
Abrazo
Juan Antonio, me voy con el libro a dormir, gracias por tus palabras
Un abrazo
Druida, me gusta tu definición del todo, y la combinación de sueño y realidad ;)
Un abrazo
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